sábado, 25 de diciembre de 2010

Capítulo 1



  Mi nombre es Dark Moon y tengo diecisiete años humanos. Mi cabello es de color negro y mis ojos de un intenso marrón. Soy un demonio y estoy orgullosa de ello. No tengo ningún rabo puntiagudo ni cuernos como los humanos piensan que tenemos. Nuestro aspecto es como el de ellos, la diferencia es que tenemos habilidades que los humanos consideran poderes sobrenaturales. Mi padre es uno de los demonios más poderosos , y eso me ha proporcionado el respeto  de los  habitantes del infierno.
     Soy alérgica a una cosa, los ángeles. Siempre había sido de aquellos demonios que había pensado que tendría que llegar un día en  que los ángeles y los demonios llegaran a un acuerdo y existiera la paz, pero cuando Thunder Storm asesinó a mi madre la ira inundó mi cuerpo y desde entonces no tengo nada más que sed de venganza. Es verdad que fue mi padre quien comenzó todo esta paranoia matando a su esposa, pero eso no me quita las ganas de acabar con su tesoro más preciado… su descendiente.
     Era por la mañana y se presentaba un día bastante bueno, el cielo tenía  un color rojo muy intenso. Tras ver el cielo por la ventana, mi cara se iluminó con una sonrisa, decían que algo bueno sucedía cada vez que el cielo tomaba ese color rojo.
     Me dirigí a la habitación de mi padre, quien aún descansaba. Sabía que ya quedaba menos para la venganza. Cuando entré en su habitación notó mi presencia y se despertó. Al verme acarició mi mejilla y sonrió.
     -¡Buenos días, hija!
     -¡Buenos días, padre!-hice una reverencia ante su presencia-. Hoy los soles nos han recompensado con un hermoso cielo de color sangre.
     -Ya sabes lo que significa eso-dijo incorporándose en la cama-. Hoy algo bueno nos sucederá.
     -Lo sé mejor de lo que crees, padre-mi sonrisa desapareció al recordar a mi madre-. Espero que mi deseo de venganza se cumpla.
     -Algún día… algún día-mi padre comenzó a llorar-Thunder Storm llorará lágrimas de sangre por la pérdida de su descendiente y entonces podrás decir que la venganza se ha cumplido.
     Cuando ya dejé a mi padre me dirigí a La Laguna, que era el último lugar al que asistí con mi madre. Cada mañana me dirijo allí y miro el lago que se descubre en el suelo. Entonces apareció Black Rose, que se dedicaba a coquetear conmigo desde que lo conocí tiempo atrás. Él sabía cuáles eran mis pasos, por lo que era imposible evitarlo.
     -Hola Dark Moon, hoy estás preciosa.
     -Piérdete, White Rose-contesté nombrando mal su nombre aposta.
     Le daba rabia que le llamara White en vez de Black, ya que White Rose solía ser un nombre de ángel y eso no lo soportaba.
     -¿Ves el cielo?-dijo señalándolo-Tal vez hoy seas mía por fin.
     -Ni aunque fuera diablo sería tuya-diablo era una categoría de espectro del infierno de menor importancia que demonio.
     -Eso es lo que tú crees, pero cuando seas la madre de mis descendientes recordarás estos días de desprecios.
     -No creo-dije con asco.
     Escuché la voz de mi padre en mi mente, nos comunicábamos por telepatía. No utilizábamos ningún aparato electrónico que nos conectara con otra persona, simplemente nos dedicábamos a adentrarnos en la mente de la otra persona con un simple pensamiento que resulta imposible para los habitantes del planeta Tierra.
     Fui corriendo hasta donde estaba mi padre mientras dejaba de lado a White Rose ¿Qué sería eso que me quería decir? Parecía impaciente ¿sería ese cielo tan bonito?
     Cuando llegué al Palacio Infernal mi padre caminaba impaciente por el vestíbulo. Al verme, se detuvo y con alegría se dirigió a mí como si acabase de ocurrir algo demasiado bueno.
     -¿Qué pasa padre?-dije tocándole el hombro.
     -¡Ha pasado! ¡Ha pasado!
     -¿Qué ha pasado?-no pude disimular mi cara de asombro, no tenía ni idea de que intentaba decirme mi padre.
     -Nos marchamos a la Tierra-miró su mano, que estaba manchada con tinta negra-. Exactamente a Nueva York, Estados Unidos, América del Norte, Hemisferio Norte…
     -¡No hace falta que digas más ¿Y eso es todo?-alcé mis cejas, me esperaba mayor cosa.
     -Explícaselo tú-dijo mi padre al encargado del Palacio Infernal.
     -Lo haré encantado-dijo quitándose las lentes-. Verás Dark Moon, fuentes confidenciales nos han contado que los ángeles planean una emboscada a través del planeta Tierra, y después de saber todos sus movimientos sabemos que eso no va a pasar. El caso es que sospechamos por las aficiones de Thunder Storm que podría estar en la ciudad de Nueva York, como te ha comentado tu padre. Como pensarás, Thunder Storm está detrás de toda esta emboscada y antes de que acaben con nosotros… nosotros acabaremos con ellos.
     -Y ¿Cuál es nuestra misión, si se puede saber? ¿Quién nos acompañará?-mi padre me miró, estaba haciendo demasiadas preguntas.
     -Por el momento, tu padre se encargará de quedarse en casa y planear tus movimiento… ya que bueno… Thunder Storm reconocería enseguida a tu padre y no queremos que eso pase. Pero a ti no te conoce, por lo que puedes actuar de incógnito si te lo encuentras. Debes de comportarte como una humana y no mostrar tus habilidades, lo arruinarías todo. Y por el momento sólo iréis tu padre y tú, nos informaréis de las novedades desde allí. No deseamos que noten nuestra presencia.
     -Y ¿Cómo sabré quién es Thunder Storm? ¿Y si su descendiente no va con él?
     -Lo reconocerás cuando lo veas, su presencia se hace notar. Y en cuanto a su descendiente… no lo dejaría solo más arriba de las nubes blancas por nada del mundo.
     -Bueno, hija ¿Qué me dices? Desde luego que con ellos podríamos calmar nuestra sed de venganza. Además, al menos sabemos que no vienen acompañados solos. Thunder Storm ha traído a toda su tropa.
     Asentí con ganas, era la oportunidad más valiosa que se presentaba. Mi padre sonrió y lloró, las lágrimas irradiaban felicidad. Me abrazó con fuerza, no parecía que fuera a soltarme.
     Horas más tarde nos encontramos delante de un espejo, tendría que poner en práctica el lenguaje humano. Llevábamos encima cien mil dólares, que según tengo entendido es una buena cantidad de dinero… por la que muchos matarían. Íbamos a vivir en una casa bastante lujosa y de dos plantas, nos seguirían enviando dinero desde el infierno.
     Nos pusimos delante de un espejo que tras mostrarnos durante unos segundos nuestro reflejo pudimos ver a varios niños jugando en el asfalto, sus progenitores llamándoles y diciéndoles que tuvieran cuidado con algo a lo que ellos llamaban coche.
     El encargado nos hizo una señal para que pasáramos, ya que nuestro espejo no era como el de la Tierra y podíamos traspasarlo.
     Mi padre introdujo su dedo en el espejo y éste realizó un agujero. Estaba desesperada por llegar a la Tierra. Cuando mi padre sacó su dedo índice me miró con malicia y yo se la devolví con mucho gusto.
     -¿Estás preparada?-dijo cogiendo mi mano.
     -¡No sabes cuánto!
     Y entonces cruzamos el espejo.

6 comentarios:

  1. Me gusta :) El argumento está bien, es lo típico pero todos los argumentos son iguales(según el género o tema) para que sea distinto, tienes que meter otras historias o detalles pequeños y también marcar tu forma de escribir. Pero yo creo que podría estar mejor relatado, sobretodo no repetir las palabras, por ejemplo, espejo; ni explicar las evidencias :)
    Si quieres más consejos: lelena94@hotmail.com y así tú también puedes aconsejarme sobre mis textos :)
    te sigo.

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  2. Por cierto, el diseño del blog está genial, sencillo pero bonito y relacionado con la historia: el rojo sangre :)

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  3. Me lo he leído y me ha gustado mucho, coincido con Helane en cuanto a gramática y estructura pero me parece que no te va a costar nada sorprendernos con un segundo capítulo incluso mejor que este.
    Yo también te sigo y por si en algún momento te aburres puedes pasarte por mi blog y darme tu opinión sobre lo que escribo XD

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  4. HOLA CARIÑO!! EN CUANTO LEI EL EVENTO NO PUEDE HACER OTRA COSA QUE APARCAR MI NOVELA Y EMPEZAR A LEER LA TUYA PORQUE YO TENGO ESCRITA UNA NOVELA DE ANGELES Y DEMONIOS :D
    ME GUSTA, PERO COINCIDO CON ELLAS :)

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  5. Me encanta, es genial ^^
    Pero Helene tiene razón con lo de explicar las evidencias, etc.
    Te sigo, pásate por mi blog, también estoy escribiendo una historia ;)

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  6. ooohh increible yaraaaa uuff como mola es uan historia fantastiiiccaaa =)

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